La Agrupación Independiente de Santa Úrsula recrimina la insensibilidad y la falta de compromiso del gobierno PP-PSOE con los comedores escolares en verano, una medida social impulsada por el Gobierno de Canarias por segundo año consecutivo para paliar el drama de las familias asfixiadas por la crisis.
En un municipio con más de 2.000 parados y unos niveles elevados de pobreza, un porcentaje importante de niños y niñas tienen problemas para alimentarse. Sin embargo, el 30% de las plazas quedaron vacías. La falta de información a las familias, la nula coordinación entre los diferentes organismos municipales y la ausencia de transporte impidieron que se beneficiasen un número mayor de menores. Estos problemas surgieron también el año anterior, viéndose perjudicados los menores de las zonas más alejadas.
En tiempos de dificultades, deben olvidarse las apetencias personales y dar prioridad a los ciudadanos, garantizándoles la cobertura de sus necesidades básica.